Nació hace exactos 100 años en Comodoro Rivadavia, Chubut y hoy sus tres divisiones -petróleo y gas, cemento y energías renovables- construyen el futuro del país y la región.
La empresa PCR nació en 1921, hace exactos 100 años, como una firma petrolera en el Km. 8 de Comodoro Rivadavia, Chubut y desde entonces se ha especializado en la producción de petróleo y gas natural, cemento y en la generación de energía eléctrica a través de fuentes renovables.
En estas tres divisiones, PCR cuenta con algo en común: la búsqueda de proyectos de largo plazo que generen valor para todas las partes involucradas: las comunidades del lugar donde se emplazan los proyectos, su gente, contratistas, clientes y el Estado (Municipio, Provincia y Nación).
Alcance internacional
La compañía es de origen chubutense, pero su proyección internacional la llevó a instalarse en otros mercados continentales donde también desarrolló proyectos vinculados con el petróleo, al punto de operar hoy en día cuatro bloques en la cuenca Oriental del Ecuador, y a participar en uno en la cuenca Magdalena en Colombia.
Su nombre remite a lo que hace: Petróleo, Cemento y Renovables, y su historia comienza en 1921 como una empresa dedicada a la producción de hidrocarburos en la provincia de Chubut, siendo la segunda empresa más antigua de la industria petrolera y que continúa en la actualidad desarrollando dicha actividad en las provincias de La Pampa y Mendoza.
En 1952, inició la producción de cemento en su planta de Comodoro Rivadavia, hasta convertirse en nuestros días en el principal fabricante de este producto en la región patagónica y en el mayor exportador de cemento de Argentina.
Los yacimientos “El Sosneado” y “El Medanito”, en la provincia de Mendoza y en la provincia de La Pampa, respectivamente, fueron los principales desarrollos de PCR en el sector de hidrocarburos en la década del 90’. Ambos continúan siendo operados por la empresa.
En 1999, a través de su subsidiaria Petroriva, la empresa inició sus actividades en Ecuador, con una participación del 40% de los campos de petróleo Palanda y Pindo. En 2008, PCR inauguró una nueva fábrica de cemento en Pico Truncado, provincia Santa Cruz, que sigue siendo una de las plantas más modernas de la Argentina.
En 2014, en tanto, adquirió la participación de su socio en los yacimientos Palanda y Pindo, en Ecuador. Así, pasó a tener el 100% de dichos activos. En 2019, logró la adjudicación, en una licitación internacional, de dos bloques de exploración, Sahino y Arazá Este, ubicados en la provincia de Sucumbios, en la Región Amazónica de Ecuador.
Compromiso sustentable
En 2016, esta centenaria compañía reafirmó su indeclinable compromiso con la sustentabilidad, luego de ganar su primera licitación pública dentro del Programa RenovAr, que promueve el abastecimiento de energía eléctrica a partir de fuentes renovables, y por el cual construyó el Parque Eólico del Bicentenario I y II en la provincia de Santa Cruz, con una capacidad instalada de 126 MW y una inversión de U$S 150 millones.
En julio de 2020, PCR puso en operación su segundo proyecto eólico de 203,4 MW en el partido de Tornquinst, provincia de Buenos Aires, convirtiéndose en el segundo mayor productor de energía eólica del país.
La compañía realiza todas sus operaciones cuidando el medio ambiente y de forma segura, siendo todos los proyectos que se encaran desde PCR beneficiosos para las comunidades donde están emplazados, transformándose en una de las características diferenciales que los enorgullece.
Sobre este importante aspecto, hablamos con Martín Federico Brandi, CEO de PCR:
-¿Qué cifras y proyecciones manejan respecto a las energías generadas por fuentes renovables?
-El objetivo establecido por la ley 27191 de 2015 es que las energías renovables lleguen al 20% de la matriz eléctrica Argentina. En la actualidad aportan el 12% de la energía eléctrica generada en el país. Por nuestra parte, PCR genera el 10% de dicha energía renovable.
Queremos sostener la participación que logramos, para lo cual seguiremos analizando nuevos proyectos con el objetivo de abastecer la demanda industrial.
-Ligado a esto, ¿estamos efectivamente encaminándonos a un nuevo paradigma en cuanto a fuentes de energía? ¿En qué estado se encuentra la Argentina en relación a ese cambio?
-La transición energética es una realidad que se da en todos los países a mayor o menor velocidad. Argentina tuvo avances significativos a partir de la ley 27.191. Hoy estamos a mitad de camino respecto al objetivo del 20%, aunque, por otra parte, dada la alta competitividad de las renovables es esperable superar el objetivo del 20% establecido por la ley.
-¿Hay nuevas maneras de lograr que la extracción de hidrocarburos sea más “limpia” respecto al medio ambiente?
-La extracción de hidrocarburos sigue siendo necesaria para abastecer la demanda energética. Dicha actividad viene incorporando tecnologías para mejorar su desempeño ambiental con sistemas de monitoreo remoto y busca minimizar su huella de carbono, incorporando metodologías que mejoran la eficiencia y evitan el venteo de gas natural.
Por otra parte, el gas natural es el combustible fósil más limpio y es un gran complemento para las renovables por la posibilidades operativas que brindan las actuales turbinas a gas, por lo que suele referirse al gas natural como combustible de transición.
-Pensando hacia delante, ¿cuál dirías que es hoy el mayor desafío para una empresa centenaria como PCR? ¿Un mayor crecimiento, una renovación/transformación, una mayor expansión territorial…?
-El desafío de cualquier empresa centenaria es saber adaptarse a los cambios. En este sentido nuestra apuesta por las renovables es un paso en dicha dirección, entendiendo que cada vez tendrán un papel más importante en el mundo de la energía.
Sobre todo, si consideramos que la penetración de las renovables viene creciendo sostenidamente en todo el mundo y hay cambios en marcha respecto a la movilidad que pueden ser un catalizador que acelere la incorporación de renovables.
FUENTE: CLARIN